viernes, 7 de enero de 2011

MISIÓN IMPOSIBLE IV: CRUZADA TECNOLÓGICA EN LA ESPAÑA DE PROVINCIAS

  Somos lo que aprendemos.  Hace unos años, cuando la tranquilidad y la simplicidad era dueña de nuestras rutinas, comenzó una auténtica invasión tecnológica. En nosotros estuvo la decisión de dejarnos arrollar por ese tren o subirnos a él. Pero para subirse a un tren en marcha hay que tener unos reflejos increíbles y, además, avanzar más rápido que él por lo que aún hoy, algunos,  seguimos corriendo detrás.

 Otros, de más edad que yo e incluso de menos, se rindieron, ni siquiera escucharon el ruído de la locomotora, a éstos no les hablemos de facebook, ni de twenti, y mucho menos de Ipad, Ipod, Tablet, y qué se yo cuántos términos más que para ellos son aire.
  Es cierto que la vida diaria puede resultar  más fácil gracias a parte de esta tecnología,  llegada del más allá (Apple, Mac, HP, etc...), pero también es cierto, que en determinados lugares, mi ciudad por ejemplo, hay mucha gente que sigue siendo igual de feliz aunque su vida sea un poquito más complicada, sin vitrocerámica, sin teléfono móvil y, sobre todo, sin Internet, ese gran monstruo de la información.
  A mi me resulta impensable pasar mis días sin un teléfono móvil, o sin leer mi correo electrónico, y mucho menos prescindir de Google. Me considero una adicta a la tecnología, a estar informada, a buscar, a encontrar, a saber, a hacer, a aprender, pero también, admiro inmensamente a todas aquellas personas, a quienes considero verdaderos héroes de hoy, que no entienden ni quieren entender este mundo tecnológico.   Me enorgullece que podamos coexistir y encima disfrutarlo.

4 comentarios:

  1. Aunque se puede vivir sin tanta información es cierto que crea dependencia y sólo tenemos que ver que cuando salimos fuera y no tenemos Internet, a la vuelta lo primero que hacemos es mirar el e-mail.

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  2. Cuánta razón tienes, es como una droga, sana(está por verse), pero que engancha igual.

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  3. La verdad es que hemos pasado a depender del móvil de una manera que parece que el no tenerlo encima es como si no lleváramos ropa, se ha convertido en algo indispensable. Antes, a la hora de quedar con los amigos se decía una hora y un sitio y allí estábamos todos (10 minutos antes o después), pero luego se pasó a la moda de los toques (dame un toque cuando estés allí), y ahora que no importa tanto gastar, se queda a través de SMS cuando no se hace a través de redes sociales. En fin, que los avances tecnológicos están muy bien siempre que faciliten la vida de la gente, pero hay algunas cosas que se nos están escapando de las manos (veáse Internet/youtube/redes sociales en las que se ve pornografía infantil, agresiones grabadas con el móvil, .....)
    Salu222

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  4. Es cierto que Internet y las redes sociales pueden llegar a ser muy perjudiciales, pero no es culpa de ellos en sí, sino de tanto desaprensivo que hay en el mundo que, toquen lo que toquen lo estropean y lo vician.

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